Tony Lawson es hoy en día una figura destacada entre los
economistas que se oponen al enfoque tradicional
(mainstream) de la economía, cuya supremacía se ha
impuesto a lo largo del siglo XX y lo que va del XXI.
Su idea pionera de aplicar a la economía los preceptos del enfoque
filosófico sistematizado como realismo crítico
[]; su fuerte compromiso para promover un cambio en la forma
de hacer economía, que haga de la misma una verdadera ciencia social y
no meramente un ejercicio de modelística; su análisis minucioso de las
causas que explican los diversos problemas que afligen a la economía
moderna, son parte del espectro de ideas que propone como pilares sobre
los que debe fundarse el pensamiento económico actual y del
futuro.
Son cuatro las tesis de Lawson con las que se explica el estado
actual de la economía:
Actualmente, la disciplina de la economía en términos académicos
está dominada en un grado significativo por una tradición establecida u
ortodoxia, la esencia de la cual está en la insistencia en el uso de
métodos de modelización matemático-deductivos.
El proyecto tradicional no se encuentra actualmente en condiciones
sanas.
Una razón que explica por qué el proyecto establecido funciona tan
mal es que el uso de los métodos matemáticos-deductivos no son
apropiados.
A pesar de sus ambiciones, el proyecto moderno establecido obliga
a la economía a comprender el potencial explicativo, de estas
herramientas, en el sentido de ciencias naturales.
[]La crítica de Lawson se centra en la improcedencia del
“método deductivo” de la economía neoclásica, que
implícitamente asume una ontología de sistema cerrado de la naturaleza
de la realidad.
En términos de crítica estrictamente, es prudente recordar las
palabras de Whitehead cuando dice que cuando se está criticando la
filosofía de una época no se debe poner mucha a atención a autores o a
posturas intelectuales particulares
[].
En este sentido, el proyecto científico sustentado por Lawson
proclama la falibilidad y la parcialidad del conocimiento
[], y entiende por sistema cerrado el uso de un sistema que
es un intento de realismo empírico, el cual refleja la creencia en una
ontología plana y comprende sólo las observaciones de los
acontecimientos
[].
Lawson encuentra que existen similitudes ontológicas entre el
enfoque heterodoxo de la economía y el del realismo crítico. Por eso sus
esfuerzos se concentrarán en iniciar una línea de pensamiento basada en
esta idea. Dado que para Lawson un modelo no debe ser invocado para dar
una imagen exacta del objeto, un elemento central en el programa
crítico-realista es que cada paradigma (sus métodos y teorías) tiene una
ontología subyacente.
[]De este modo, el vínculo entre un método o teoría y su ontología
no puede evitarse. Y este vínculo establece una necesidad de orientación
práctica en la realización de proyectos de investigación en relación con
el realismo crítico.
Realismo crítico implica que, debido a que los objetos de las
ciencias sociales son inherentemente complejos y tienen muchos aspectos
importantes que pertenecen a distintas categorías, no es posible
capturar algunos de los aspectos más amplios de los objetos con métodos
cerrados. Por otra parte, según el realismo crítico los motivos no
pueden pasarse por alto porque motivos son causas. Los realistas
críticos rechazan la ecuación tradicional de, por un lado, lo
cualitativo corresponde al terreno exploratorio o descriptivo y, por el
otro, lo cuantitativo corresponde a la exposición de los métodos.
Será indispensable observar la conexión entre la ontología y el
método. Lawson afirma que la construcción del
“proceso
ontológico” en una investigación empieza por el diseño
metodológico. Esto permite desembocar en la propuesta más importante: el
rechazo de métodos aparentemente implícitos.
Si la construcción abarca diferentes métodos hay, por tanto,
diferentes ontologías, según lo expresado por la filosofía tradicional
de la ciencia. Tony Lawson sostiene que la economía debe abarcar una
“ontología social” para incluir las causas subyacentes a
los fenómenos económicos. Esencialmente, el autor sostiene que la
economía moderna presenta numerosos problemas y/o fallas. Como él mismo
dice:
La economía moderna está enferma. El rigor analítico es todo y
la importancia práctica es nada.
[]
El problema principal, argumenta Lawson, es que la rama u
orientación dominante dentro de la economía se caracteriza por la
insistencia en el uso de un tipo de método en particular: el análisis
matemático-deductivo, que se manifiesta concretamente en la premisa de
que todo trabajo en economía, si quiere ser considerado científico, debe
estar expresado en términos de un modelo matemático (o econométrico). En
palabras de Lawson:
Para un economista de la corriente dominante, teoría significa
modelo, y modelo significa ideas expresadas en forma
matemática
[]
Este énfasis desmedido en el método es el que origina, según
Lawson, el cuestionable estado actual de la economía, y la falta de
atención a la ontología. Ciertamente, los métodos de modelización
matemática usados por los economistas raras veces son cuestionados. Por
consiguiente, la carencia de una adecuación ontológica ni siquiera es
considerada
.[]La carencia de una adecuación ontológica entre los modelos y la
realidad, implica por un lado, que las teorías siempre están
relacionadas con una ideología y por otro lado que en el caso del
mainstream el sustento ontológico no es considerado
como parte de las herramientas en la construcción de su interpretación o
versión de lo que el mundo económico es.
Esto se debe a que el tipo de
realidad
compatible con el uso de modelos formales es muy diferente
del tipo de realidad de sistemas abiertos que caracteriza al reino
social y, dentro de éste, a la economía. En otras palabras, hay una
inconsistencia entre la ontología que los modelos matemáticos
implícitamente presuponen, y la ontología que efectivamente caracteriza
a la realidad económica.
Para Lawson, la teoría económica está obligada a enfrentar el
mundo real porque
“la teoría económica debe lidiar con el mundo
real. La gente espera que la teoría proporcione herramientas útiles para
alcanzar objetivos útiles”.
[]También cabe preguntarse sobre la pertinencia de postular si en
las matemáticas en general (que para Lawson están dominadas por el
análisis deductivo), se establece un discurso o un lenguaje particular.
Particular y ontológicamente diferente, además, al que se puede postular
como el
“adecuado” para el análisis de la realidad
económica y social.
Podríamos aventurar que efectivamente se establece un lenguaje
particular en el discurso dominado por el análisis deductivo, que es
insuficiente, en opinión de Lawson, para el tratamiento adecuado de la
realidad económica y social.
La economía establecida -que es una acabada expresión del
deductivismo- simplemente implica que cualquier esfuerzo explicativo
asume, postula o construye regularidades (de carácter determinista o
estocástico).
[]